viernes, 11 de marzo de 2011

Stop walking.

-Pero,¿me quieres?
-No lo sé, de verdad, no sé.
-¿Cómo no lo vas a saber Anne?¡Dios mio, dime!
-Es que no, no puedo decirte. Es.. es como.. es como cuando es tu cumpleaños y tu madre te lleva a comprar tu regalo. Pero, no te gusta nada, nada en especial. Y coges algo por coger, es bonito, pero no es esa clase de regalo que guardarías a tu lado eternamente.
-O sea, tan solo soy eso ¿Algo pasajero?¿Un beso, dos, un polvo?
-No Steve. Bueno sí. Eres como mi regalo de cumpleaños, quizá el próximo regalo te sustituya o quizás no.
-¿Y qué tengo que hacer?¿Quedarme quieto esperando a qué decidas que hacer conmigo?
-No, las cosas no funcionan así.
-Las cosas no siempre son como tú quieres, Anne.
-¿Sabes Steve? La cagaré, la cagaré mil veces. Lloraré, me perderán las formas, te gritaré y perderé los nervios. Pero seré yo en cada instante, en cada beso, en cada abrazo. Puede que mañana aparezca mi Brad Pitt y esto termine, o puede que tú termines por convertirte en él. No sé, no tengo ni idea de lo que va a ser de nuestras vidas. Pero tampoco voy a dejar escapar la oportunidad, no pienso hacerlo. Probaremos, nos besaremos, y si toca quererse, nos querremos, y si toca olvidarse, nos olvidaremos.
-Entonces,¿por dónde empezamos?
-Por disfrutar.


No hay comentarios:

Publicar un comentario